El gobierno vuelve a frenar subas de luz y gas y minimiza la de combustibles

El Gobierno decidió frenar nuevamente los aumentos de tarifas de luz y gas previstos para julio, los cuales hubieran incrementado las facturas de hogares, comercios e industrias entre un 2-3%. Estas subidas estaban destinadas a mejorar los márgenes de las empresas de transporte y distribución de energía eléctrica y gas natural. Como consecuencia, las empresas afectadas tendrán que reducir su plan de inversiones. En contraste, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció un incremento de impuestos a los combustibles que impactará en un 1% en el precio de la nafta y el gasoil a partir del 1 de julio.

Ambas medidas están orientadas a consolidar la baja de la inflación, que se había interrumpido en junio debido a ajustes de tarifas anteriores. Las empresas eléctricas y de gas acumularán un atraso en sus tarifas del 50% y 25% respectivamente, lo cual podría retrasar sus planes de inversión. Sin embargo, el Gobierno prometió convocar a la Revisión Quinquenal Tarifaria antes de fin de año para definir un plan de inversiones a cinco años, compensando los atrasos de este año con mayores aumentos en el futuro. Además, la suba de los combustibles incorporará la devaluación mensual del peso y el alza de impuestos, con la nafta llegando a $930-$935 por litro en Buenos Aires.