Fue liberado el hombre acusado de abusar de un menor en un hotel céntrico de la ciudad
Si bien días pasado había sido trasladado desde la comisaría de la localidad de Rojas donde permanecía aprehendido a la Unidad Penal N° 3 de San Nicolás, finalmente ahora la Justicia le otorgó la libertad el pasado 25 de julio aunque sigue vinculado a la causa mientras dure la instrucción
El hombre de 30 años fue denunciado en julio pasado por la familia de un joven de 17 años que manifestó haber sido víctima de abuso sexual en el Hotel Eser.
Mientras la causa continúa se esperan los resultados de los distintos peritajes que se realizaron desde que se realizó la denuncia para ir definiendo el futuro judicial del imputado.
El mensaje de la familia
A través de redes sociales, se viralizó el mensaje de un familia (no aportaremos nombres para preservar de identidad de la víctima). El mismo expresa: «No dije nada en su momento, me guardé los sentimientos por cuidar la privacidad de mi familia con respecto a todo lo que estaba pasando. Mis papás me educaron de otra manera, a ser respetuosa y paciente, a dar el espacio al otro de que actúe en lo que le corresponde.
Y una espera al pedo en este país, uno espera justicia que no llega, que tarda en llegar y no llega,
Luego de atravesar tanto, luego de un abuso hay que aguantar lo que viene después, que sigue siendo igual o peor de traumático que el hecho en sí. Recolectar evidencias, analisis, antibióticos, de pericias fisicas y psicológicas, de repetir una y otra vez lo que pasó, terapia, dar declaraciones, de tener toda la evidencia y la justicia no llega.
El abusador, libre, le dan la libertad, vayan a saber porque… tenia todas las de perder, o eso pensábamos. Pero un clásico en la justicia, siempre el abusador sale con la frente en alto y sigue viviendo su vida dejando un rastro de daños permanentes en la víctima y los que lo rodean.
Hoy, primera vez en mi vida que me atrevo a algo así, recuro al escroche público, ya que del lado de la justicia no se que esperan
A este hijo de la mierda, Gonzalo Avila, de Monte Grande, le mando mis saludos cordiales, ojalá que todo te vuelva. Que todo el daño que causaste, te vuelva por mil, que no puedas vivir en paz y te carcoma la conciencia inmunda que tenés».
