El fiscal Manso dejó libre al motochorro detenido en Baradero

Los hechos ocurrieron cuando un oficial de policía, disfrazado de mujer, salió a recorrer en bicicleta las calles de la ciudad llevando en el canasto del rodado una cartera sujeta a una cadena, a manera de”carnada” para el ladrón”.

Cuando el motochoro, que en la actualidad se domicilia en una vivienda del Plan Federal, fue aprehendido, los vecinos y ocasionales transeúntes que observaron el accionar policial, aplaudieron a los hombres del orden.

El malhechor, de 33 años de edad, tras pasar la noche en la comisaría de la Policía Comunal ayer por la mañana fue conducido a la UFI 5 con asiento en nuestra localidad, cuyo titular es el doctor Marcelo Manso.

Increible

Ahora bien, si le contamos que el fiscal Manso dejó libre al aprehendido, aduciendo que el policía difrazado, al utilizar el artilugio del disfraz lo incentivó a robar, seguramente creerá que es un chiste, pero es la pura verdad.

Curiosa paradoja, que hace que no se entienda la decisión del Fiscal, cuando los elementos necesarios estaban dados en multiples denuncias que detallan las caracteristicas similares al detenido, el funcionario judicial Manso entendió que debía quedar libre.

La comunidad se pregunta, ¿Qué tiene que pasar para que un sujeto, cuyas caracteristicas coinciden con las denunciadas, quede preso?

No se entiende, y sirva como ejemplo, porque al mismo tiempo que ocurría la liberación del motochorro aprehendido en Baradero, en la ciudad de La Plata, otro motochorro, baleaba y roba a una mujer embarazada.

Nos preguntamos

Nos preguntamos, ¿es necesario esperar a llegar a una situación similar para que el fiscal Manso despierte y le garantice la libertad a los vecinos de Baradero?

Sí, entiendase así, porque los que siguen presos son los vecinos, que cada vez sienten que se les termina la libertad al no poder salir a la calle, porque los malvivientes andan como Pancho por su casa… total el fiscal le echa la culpa a la policía.

Baradero, por suerte, está lejos de convertirse en un San Pedro que semanalmente debe penar muertes evitables si se trabajará concientemente contra la delincuencia.

D. B.