Proyecto de Barbieri por los incidentes en Velez
El diputado nacional Mario Barbieri (UCR-Buenos Aires) presentó un proyecto para reclamar al Poder Ejecutivo que brinde informes al Congreso Nacional para saber “si se encuentra en análisis la búsqueda de responsables políticos sobre los incidentes producidos el 20 de Marzo de 2011 en el campeonato de Fútbol de Primera División”.
En su iniciativa, que fue acompañada por su par Daniel Katz (UCR-Buenos Aires) y por el diputado Gerardo Milman (GEN), Barbieri refiere que su proyecto está motivado en “el recurrente problema de la inseguridad en los espectáculos futbolísticos. El pasado 20 de Marzo del corriente año, causando un hondo pesar, murió Ramón Aramayo de 36 años de edad, padre de familia, simpatizante de San Lorenzo de Almagro en un confuso episodio que involucra responsabilidad de la Policía Federal”.
“Los hechos trágicos producidos el fin de semana pasado en el campeonato de fútbol local, deben indefectiblemente tener responsables políticos, ya que no se puede negar bajo ningún aspecto que el Poder Ejecutivo Nacional tiene una notable injerencia en el manejo del fútbol argentino”, indicó Barbieri.
Añadió que “es importante destacar que en un episodio similar ocurrido el 15 de marzo del 2008, también en ocasión de un partido entre San Lorenzo de Almagro y Vélez Sarsfield, en el cual un joven de veintiún años, Emanuel Álvarez, falleció de un disparo en el pecho. Este episodio fue motivo de un pedido de informe aprobado por la totalidad del cuerpo de la Cámara, de la diputada Delia Bisutti, que ha quedado sin respuesta por parte del Poder Ejecutivo hasta el día de la fecha”.
El diputado Barbieri, reclamó respuestas del PEN acerca de “qué medidas de seguridad se encontraban previstas con motivo del partido de fútbol que tendría lugar en el Estadio José Amalfitani, entre los equipos de San Lorenzo de Almagro y Vélez Sarsfield, el domingo 20 de marzo 2011”, a la vez que solicita precisiones en cuanto a “cantidad de efectivos policiales solicitados para garantizar el desarrollo del partido y cantidad de efectivos presentes”.
Asimismo, Barbieri indicó que “en consideración de los antecedentes de violencia entre las dos hinchadas y del episodio violento que resultó en la muerte de Emanuel Álvarez el 15 de marzo del 2008”, requiere información en torno a “si se tuvo en consideración, desde el Ministerio de Seguridad en forma Conjunta con la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), la posibilidad de jugar el partido de la fecha sin visitantes. En caso afirmativo, con qué fundamentos se decidió recibir a la hinchada visitante”, pregunta.
Requirió, además, “qué dependencia del Ministerio de Seguridad es actualmente responsable o se encuentra facultada para llevar adelante la tarea de coordinación de seguridad para eventos futbolísticos”, así como “qué programas o políticas respecto de Seguridad en eventos futbolísticos lleva adelante el ministerio como parte del abordaje a esta problemática” y se “identifique los montos presupuestados destinados a Seguridad en los Espectáculos Futbolísticos para los años 2009-2010-2011”.
“Una vez más nos enfrentamos a una disyuntiva, la de ser cómplices de las patotas que gobiernan el fútbol o poner un manto de orden sobre el deporte más popular de la Argentina”, subrayó Barbieri, quien indicó que “desde la creación del nuevo Ministerio de Seguridad, por decreto 1993/2010, el pasado diciembre 2010, la Subsecretaría de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos (SUBSEF) ha dejado de existir por decreto 2009/2010”.
Puntualizó que “es de gran relevancia conocer qué dependencia del Ministerio de Seguridad se encuentra facultada para llevar adelante la coordinación de seguridad en eventos futbolísticos ya que, desde el cese de funciones de la SUBSEF, el Ministerio no ha difundido información pública sobre quién o qué dependencia es responsable de la coordinación y provisión de seguridad para los eventos futbolísticos”.
“Es también de interés intentar comprender con qué abordaje el Ministerio afronta esta problemática tan recurrente de violencia en el fútbol y poder identificar responsables políticos. La falta de información pública respecto de partidas presupuestarias y políticas tendientes al mejoramiento de esta situación, provocan en la sociedad una certeza sobre la ausencia de políticas públicas que aborden el flagelo de la violencia en los espectáculos deportivos. El resultado es que, una vez más, los violentos se apoderan del espacio que debería ser de todos y generan desmanes donde debería existir el orden y la tranquilidad”, concluyó Barbieri.